UN AVIÓN CRUZA EL CIELO DESDE MI VENTANA
es la cosa más habitual del mundo
que un avión cruce el cielo
quien está arriba me puede ver claramente
en mi ventana oculto
tal vez sin una gota de miedo dirá:
iré a cualquier lugar
miraré lo que deseo mirar
y tocaré cuanta cosa quiera
besaré hasta el cansancio
y estrecharé mi mano a quien desea recibirla
el truco es
dirá
divertirse observando las nubes
desde las alturas
todo da lo mismo
en un segundo
el avión se viene abajo
no quedará ninguno de nosotros
para contarlo
seremos
fantasma
de un vuelo
hacia la nada
sin embargo
arrastraremos a los que van con nosotros en este vuelo inconsútil
desde mi ventana
veré solo el estallido
la luz perdiéndose en un kosmos oscuro y frío
soledad
de las cosas sin nombre
cementerio de luciérnagas apagadas
huesos de mamíferos
que subieron
mil montañas
para perecer
entre barrotes
en esa gigantesca escena de magia
habrán quizá arrepentidos mirando un cielo negro
y quienes piensen un segundo
que no tendrán un pan en la boca
ni su teléfono móvil para contarlo
en la refriega sudorosos habrá cantores
de lo divino y lo humano
haciendo sonar sus guitarras
muertos ángeles niños mamíferos
iluminados por un agujero negro que muere al final de los tiempos
y una catarata
transparente
lucida
con remeros cayendo al vacío
todo avión lleva su propio incendio dentro del corazón
y azules pájaros revoloteando en la cabina
en la ventana pegaré al Ecce Homo de Borja
se encenderán algunas luces en la alameda
y tal vez tengan un segundo para un emparedado
o un segundo
para eliminar toda basura del avión en medio del Sahara
o quizá
una milésima de segundo con un virus en la muela contemplando al Cristo
30122020